OPERACIÓN "MINCEMEAT"
El desarrollo de los acontecimientos llevaron a que en 1943 Sicilia se convirtiese en un punto estratégico una vez finalizado con éxito para los aliados la campaña en el Norte de África. El nuevo objetivo era la invasión del sur de Italia y avanzar hacia el centro de la Europa ocupada.
En la Conferencia de Casablanca en enero de 1943) Eisenhower y Churchil convinieron que la invasión se llevaría a efecto en el mes de Julio de ese mismo año.
Las maniobras para la invasión de Sicilia tenían que ser minuciosamente estudiadas. La topografía del terreno favorecía a los defensores, por lo que mantener en secreto el lugar del desembarco era fundamental para preparar la ofensiva. En la isla, dotaciones italianas y alemanas estaban en alerta permanente ante la posibilidad de ser atacados. Entre los cuerpos de ejército, la Luftwaffe tenía allí una de sus principales bases, desde donde hostigaba las posiciones enemigas en Malta.
Ante la necesidad de que las fuerzas enemigas no se concentraran en esta zona, el servicio de inteligencia británico ideó un plan para engañar a los alemanes a través de la documentacion falsa que encontrasen junto a un oficial inglés muerto en combate. Un plan parecido había sido utilizado en Agosto de 1942 en la batalla de Alam Halfa. Se abandonó un cadáver en un coche que había explotado cuando cruzaba un campo de minas. Llevaba consigo un mapa con un plano falso de otros presuntos campos de minas aliados. Al intentar esquivarlos, el general Rommel cayó en la trampa quedando sus panzers atrapados en la arena del desierto.
Ewen Edwin Samuel Montagu sería el encargado de buscar los medios para que la historia resultara creíble, por lo que tras barajar varias opciones se decantaron por basar el engaño sobre el fallecimineto de un mensajero especial que habria muerto en un accidente aéreo en su viaje entre África y el Reino Unido, cuyo cuerpo debia de de ser encontrado en España, por las buenas relaciones existentes con el régimen nazi.
La costa de Huelva resultaba propicia para que se produjera el hallazgo puesto que habia pocos pobladores y el hallazgo de un extraño, muerto en sus playas, sería de inmediato puesto en conocimiento de las autoridades locales,y asu vez a las autoridades alemanas. Además, en Huelva se encontraba el espía alemán Adolf Clauss en la que su padre era cónsul de Alemania y tenía contactos con altas personalidades militares del régimen en Madrid. Su tapadera fue la de desarrollar actividades como técnico agrícola.
- Para la identidad del cadáver se decidió que fuese un oficial de enlace de la Royal Navy, llamado William Martin, nacido en 1907 en Cardiff, Gales, encontraría la muerte en un accidente aéreo durante el viaje Gibraltar-Londres, cuando transportaba información de gran importancia para el desarrollo de la guerra en el Mediterráneo.
Se cuidaron todos los detalles sobre su familia, personalidad, vida y costumbres. En su equipaje, en su cartera y en sus bolsillos se pusieron cartas de amor con aspecto de haber sido leídas en muchas ocasiones, junto a una fotografía de su novia ficticia, llamada Pamela. El retrato correspondía a una miembro femenina del equipo de Montagu. Para ella había comprado Martin un anillo de prometida, según podía comprobarse en un recibo en el que constaban su importe en libras esterlinas. Unas entradas al teatro para ver la "Strike a New Note" en el Teatro Príncipe de Gales de Londres indicaban que había estado con Pamela en la representación el día 22 de Abril, víspera de su fatal viaje. En su cuello pusieron una cadena con una cruz de plata y placas de identificación en las que podía leerse: "Mayor Martin, R.M., R/C" (Mayor Martin, Royal Marine, Roman Catholic). También llevaba otra misiva de su padre, algunas llaves, recibos atrasados que explicaran los movimientos de Martin los días previos a su partida. Además de billetes de autobús, cigarrillos, cerillas,... Por los objetos que portaba, podrían deducir que se trataba de un joven algo descuidado en su vida cotidiana, despreocupado de sus cuentas económicas (llevaba un aviso de pago por una deuda con el Lloys Bank) y hábil especialista en organizar maniobras militares anfibias, motivo por el que había sido destinado al frente del norte de África. Así constaba expresamente en la carta dirigida por Lord Louis Mountbatten, jefe de Operaciones Combinadas a Andrew Cunningham, Comandante Naval británico en el Mediterráneo. En ella se decía que el mayor William Martin era gran conocedor de las técnicas de desembarco en lanchas. Mountbatten cedía al oficial William Martin para que prestara sus servicios en el desembarco que se avecinaba. Según su propio criterio, Martín hizo un buen trabajo en Dieppe, y el fracaso de la operación se debió al error de los otros oficiales.
Elaborada la estrategia William Martin habia que encontrar el cuerpo que tuviera una edad determinada y las condiciones físicas de un militar encargado en ese tipo de misiones. Además, el motivo de la defunción debería también coincidir con el plan elaborado. En el Hospital Saint Pancrass acababa de fallecer un paciente que sufría de neumonía, con lo que el encharcamiento pulmonar servía para indicar varios días flotando en el agua, con el chaleco salvavidas.El cadaver fue trasladado a una cámara de conservación frigorífica en las dependencias del MI5. La falsificacion de su cartilla militar requerió de un voluntario con cierto parecido en su cartilla militar de identidad. Cuando intentaron hacérsela al verdadero fallecido, el aspecto cadavérico no se podía disimular, ni con trucos de revelado ni con retoques de maquillaje. Circunstancialmente se localizó a un militar con cierto parecido, que una vez caracterizado, posó para el retrato.
Para convencer al enemigo de que los primeros ataques se producirían simultáneamente en la isla de Cerdeña y en Grecia, emplearon una serie de cartas, simulando correspondencia entre altos cargos militares, comentando detalles de la operación. De este mensaje se deducía que Sicilia no era el verdadero objetivo, sino que las fuerzas situadas en la zona tenían como misión desorientar al enemigo sobre los que serían los verdaderos objetivos para entrar en Europa.Los documentos fueron meticulosamente elaborados e introducidos en una maleta hermética, con una cadena esposada a la muñeca del cadaver.
El submarino HMS Seraph transportó el cadaver hasta el sur de España.
El 30 de abril, a las 4:30 horas y a una milla marina de las playas de Huelva, el submarino salió a la superficie para arrojar al mar el cadaver junto a él un bote salvavidas de las Fuerzas Aéreas británicas.
Aquella mañana varios pescadores descubrieron el cuerpo de William Marín flotando cerca de la playa de Mata Negra. José Antonio Rey María fue el pescador que se encargaría de remontarlo hasta la orilla de la playa de Mata Negra y ponerlo en conocimiento de las autoridades locales,y estos a la Comandancia de Marina. El juez instructor de la Marina de Huelva, se trasladó a la zona para efectuar el levantamiento del cadáver y se hizo cargo del maletín del capitán inglés. Este se dispuso a entregárselo a su amigo personal, el vicecónsul británico Francis Haselden pero este al estar al corriente de la Operación, rechazó el maletín pidiéndole al juez que siguiera el trámite ordinario con las pertenencias del ahogado y las entregara a las autoridades españolas. Así lo hizo el juez lo que permitió que accedierana la información los espías alemanes. Adolf Clauss fotografió las cartas del maletin y las envió a Gustav Leissner, Jefe de los Servicios Secretos germanos en España, y fue enviado a Berlín.
El cuerpo del capitán Martin fue enterrado el día 2 de Mayo.
En el mes de Junio, el periódico The Times publicó en su lista diaria de los caídos en el frente, el nombre de William Martin. El Almirantazgo hace lo mismo, vinculándolo a la muerte de otros dos oficiales realmente fallecidos en un vuelo sobre el mar. Estaban seguros de que los servicios secretos alemanes permanecían atentos a ese detalle. Para dar mayor veracidad a toda la historia, el 4 de Mayo el Servicio Secreto Naval inglés dirige desde Londres un mensaje confidencial y urgente a Sir Samuel Hoare, embajador del Reino Unido en España en una clave secreta de bajo nivel. En él se le insta a que envíe a Inglaterra, con absoluta prioridad, los documentos de Martin, por ser estos de alto secreto y gran trascendencia. Le pide que eleve al gobierno español una petición formal para que le sean devueltos, con la máxima inmediatez posible, los papeles originales.Tras la entrega fueron enviados a Londres donde comprobaron que habian sido manipuladas y por tanto el contenido había llegado a su destino; ahora la cuestión era averiguar si los alemanes se habían tragado el anzuelo.
El alto mando alemán envío desde Sicilia a Grecia varias divisiones acorazadas. Una de panzers se desplazó desde Francia y del frente ruso hacia los Balcanes. También la flota de dragaminas con base en Sicilia puso rumbo al Egeo, dejando indefensa la isla. Lo mismo sucedió con las baterías antiaéreas de la zona. Córcega y Cerdeña fueron fortificadas dejando Sicilia totalmente desguarecida.
El desembarco en Sicilia, denomianada operación "HUSKY", se produjo el día 10 de Julio de 1943 desde el sur sorprendiendo a italianos y alemanes que mantenían centrada su atención en Cerdeña.
El día 17 de Agosto habían tomado la isla. El coste de vidas humanas se redujo en ambos frentes, gracias al éxito de la operación "Mincemeat".
La operación "Mincemeat" se mantuvo en secreto hasta bastante tiempo después de terminada la Segunda Guerra Mundial, por lo que los ingleses nunca supieron de la importancia que tuvo para conseguir la victoria final.
En los archivos de la Marina de Guerra alemana se encontraron documentos que hablaban sobre la información por parte del Mayor William Martin. de la que se deprendía que la seguridad del Servicio de Inteligencia británico había fallado, y sin embargo tampoco se dijo nada entonces.
Se descubrió cuando Winston Churchill comentó flecos de aquella operación en una reunión con sus ministros jactándose de la idea. Alfred Duff Cooper tuvo conocimiento de aquello y escribiría el libro Operación Desengaño, en 1950. Entonces, el Primer Ministro inglés encargó a Montagu que relatara la verdadera historia de William Martin que fue publicada por entregas en el periódico Sunday Express con el título "The man who never was (El hombre que nunca existió)" siendo un éxito y dio lugar a una película con el mismo título.
Ewen Montagu recibió la condecoración de la Orden del Imperio Británico por su participación en le Operación Mincemeat.
Cuando William Martín fue enterrado en el cementerio de Huelva miembros de la embajada y el consulado inglés visitaban con asiduidad su tumba. También Thomas Naylor, ingeniero inglés que trabajaba en la Compañía del Ferrocarril de Zafra y que recibió el ultimátum franquista de nacionalizarse español o ser expulsado, recibió el encargo de honrar al patriota.
El 11 de noviembre, Día del Armisticio, la fiesta por los caídos de la I Guerra Mundial y sucesivas, depositaban un ramo de flores sobre su tumba.
Cuando Thomas muere, su hija, Isabel Naylor, recoge el testigo y sigue respetando aun hoy aquella herencia sentimental. La reina Isabel II la condecoró por su fidelidad al soldado desconocido con la Orden del Imperio Británico -la segunda en importancia que concede la monarquía británica-, en marzo de 2002.
En 1996 se desclasificaron los documentos relativos a la operación y se supo que la verdadera identidad del cuerpo era la de Glydwr Michael, un Galés que murió de pulmonía, por lo que se renovó la lápida y se hizo constar su nombre en la nueva tumba.