- Restaurante HORCHER, Madrid.

-Madrid fue, durante la Segunda Guerra Mundial, un escenario de espionaje y clandestinidad acompañó a la ambigua neutralidad de España, en teoría al margen de los intereses de alemanes y aliados. En el restaurante Horcher de Madrid, situado en el número 6 de la calle Alfonso XII, a unos pasos de la calle de Alcalá, se llegaron a encontrar la espía norteamericana Aline Griffith y el entonces jefe de las SS -Schutzstaffel-, Heinrich Himmler, en una de sus visitas a la capital. La bella mujer, elegante y de suaves y femeninas líneas, trabajó en la fecha para la Oficina de Servicios Estratégicos de su país -OSS por las siglas en inglés-, precursora de la CIA. Años después, en 1947, contrajo matrimonio con el español Luis de Figueroa.

Horcher, fundado en 1904 en Berlín y trasladado a Madrid en 1943 tras pasar por Viena, Riga, Tallín, Oslo, Londres y Lisboa, se configuró entonces como un destacado punto de encuentro de aristócratas, diplomáticos y, en paralelo, personalidades nazis, con el consiguiente seguimiento de los agentes aliados. De hecho, el prestigioso restaurante, que aún hoy conserva su elevada consideración y exclusividad, era el preferido de Hermann Göring, relevante imagen del partido nazi y comandante de la Luftwaffe, su fuerza aérea.

Era un restaurante de la época y venía la gente que estaba en esa época en Madrid, alemanes e ingleses.